Vinculan las enfermedades cardiovasculares con la pérdida de audición
Por: Dr. Juan A. Figueroa Vega, AuD. FAAA
Board Certified in Audiology
La enfermedad cardíaca, también llamada enfermedad cardiovascular, se refiere colectivamente a una serie de afecciones que causan estrechez o bloqueo en los vasos sanguíneos y contribuyen a los ataques cardíacos, dolor en el pecho, o accidente cerebrovascular. Es responsable de aproximadamente 610.000 muertes en los Estados Unidos y hace que alrededor de 735.000 personas en el país sufran ataques cardíacos cada año. A pesar de estos números asombrosos, muchos casos de enfermedades cardíacas podrían prevenirse a través de un estilo de vida más saludable. Febrero es el mes del corazón. Es una buena idea pensar en lo que podemos hacer para minimizar el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas e identificar posibles factores de riesgo. Una manera sorprendente de proteger su corazón es prestar atención a su audición.
El vínculo entre la pérdida auditiva y la cardiopatía está bien establecido. Una investigación de la Universidad de Harvard encontró que la pérdida auditiva ocurre 54 por ciento más a menudo en personas con enfermedad cardíaca, en comparación con la población en general.
La pérdida auditiva es también una comorbilidad conocida de la enfermedad cardíaca, con las dos afecciones que ocurren a menudo simultáneamente. La razón es que las diminutas células ciliadas del oído interno responsables de dirigir el sonido al cerebro son especialmente vulnerables al flujo sanguíneo deficiente resultante de los vasos sanguíneos estrechos. Si estas células no consiguen suficiente oxígeno a través de la sangre, pueden dañarse irreparablemente y dejarlo con la audición disminuida. Dados los efectos de la mala circulación sanguínea en la audición, cualquier pérdida auditiva detectada podría ser una señal de advertencia de un problema mayor con el sistema cardiovascular.
Si bien la enfermedad cardíaca puede provocar pérdida auditiva, mantener un corazón sano puede reducir el riesgo. Muchas de las cosas que puedes hacer para cuidar tu corazón también te ayudarán a proteger la audición:
- Evite fumar: dado que se sabe que fumar es perjudicial para el corazón y los oídos internos, dejar el hábito y evitar el humo de segunda mano puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y pérdida auditiva.
- Ejercicio: un estilo de vida activo es otra forma de proteger ambos sistemas. Ya sea que prefiera caminar, trotar, nadar u otra actividad física, hacer ejercicio por 20-30 minutos por día, cuatro o cinco días a la semana, puede contribuir a un corazón sano y una audición sana.
- Coma bien: también es importante la nutrición adecuada. Una dieta saludable para el corazón debe incluir mucha fruta, verdura, granos enteros y pescado, evitando los alimentos con altas cantidades de grasas saturadas, grasas trans y sodio.
Muy pocas condiciones de salud ocurren en un vacío — lo que sucede con un sistema puede conducir a problemas en otra parte del cuerpo. Si ya tiene pérdida auditiva, es importante que hable con su médico profesional sobre si indica enfermedad cardíaca también. Y si sospechas que tienes pérdida auditiva, su conexión con la salud del corazón debe ser suficiente razón para que te examinen la audición.