Horario flexible; un beneficio que paga
Por: Suheill M. Urdaz Montano
La próxima vez que uno de sus empleados lleve a la mesa de negociación la posibilidad de contar con un horario flexible como beneficio marginal, piénselo dos veces antes de darle una negativa. Ese pudiera ser el elemento que transforme un empleado promedio en un empleados productivo, eficiente y feliz.
En momentos neurálgicos, donde la economía del país se encuentra rezagada; el horario flexible surge como una alternativa real, tanto para las nuevas demandas de la clase trabajadora, como para las empresas y empleadores que pudieran beneficiarse enormemente de contar con empleados fuera de un riguroso 8 a 5. Más de uno ha sentido alivio al saber que puede asistir a la reunión con el maestro de su hijo a las 3 de la tarde, sin pensar que tuvo que tomar ese tiempo de su licencia de vacaciones; o bien darse el lujo de atender a su familia en las mañanas sabiendo que cuenta con un par de horas antes de llegar a la oficina. Tomar un poco más de tiempo para hacer un rico desayuno un miércoles en la mañana y mantenerse pendiente de la actividad de los chicos en la escuela, encargarse de asuntos personales importante o simplemente hacer la rutina de ejercicios sin pensar que anda contra el reloj le da un valor añadido a su oferta que pocos empleados en el mercado laboral dejarían de considerar.
Si como empleador piensa que ni usted ni su compañía están para hacer favores a su equipo de trabajo, permítame sugerirle que reconsidere su posición. La flexibilidad de horario es un “win win” en jerga boricua. Reuters Health, en su artículo “Un horario flexible favorece a la salud” cita numerosos estudios que abalan los beneficios que ofrece tener un empleado que tenga “cierto control” sobre su horario. Si bien es cierto que los resultados arrojados no prueban que el “flexitime” mejora la salud; investigaciones coinciden en que tiene un efecto notable en la reducción de estrés. Existe evidencia que asocia un alto estrés laboral con presión arterial elevada, enfermedades cardiacas y depresión. Seguramente su empresa no aspira a contar con un empleado de precaria salud, no sólo porque representaría un gasto oneroso en pólizas, servicios médicos y psicológicos, sino que su productividad se vería seriamente afectada, y esto sí le compete a usted.
Un horario flexible no sólo añade “libertad” a su subalterno para manejar situaciones cotidianas sin dejar el trabajo de lado, también le añade calidad de vida; esto en compañías vanguardistas y con cultura de bienestar es punta de lanza. Las empresas toman con mucha seriedad su responsabilidad social corporativa cónsona a la creación de espacios y condiciones laborales saludables. Por ello, además de retribución monetaria incluyen toda clase de beneficios marginales, programas de bienestar corporativo y claro, ajustes de horario conveniente para ambas partes.
Si bien es cierto que el horario flexible no se ajusta a todas las compañías ni posiciones, el empleador debe considerar algún “acuerdo” que sirva de beneficio e incentivo a su “crew”. Además de sumar positivamente a sus ejecuciones como líder, estas consideraciones establecen claramente cuan valioso es su equipo de trabajo para su organización.