Gorditos, ¿sanos y felices?
El sobrepeso, la obesidad y sus complicaciones son actualmente uno de los retos más importantes de salud en el mundo. En la población infantil, el aumento del sobrepeso y obesidad durante los últimos años es alarmante, el mismo se presenta en uno de cada tres niños. De la misma manera, los niños con sobrepeso o que son obesos tienen riesgos de tener problemas de salud graves cuando crecen. Entre estas enfermedades cabe señalar la diabetes mellitus, la hipertensión arterial, el aumento de triglicéridos y colesterol, entre otras.
Un niño que tiene problemas de peso también puede tener la autoestima baja, deprimirse, ser molestado o sufrir maltratos por su peso, sentirse mal respecto de su cuerpo, o aislado y solo. Estos sentimientos pueden interferir con la capacidad del niño de aprender, hacer amigos e interactuar con los demás.
Como padre o madre, o quien provee los cuidados al niño, usted tiene mucho poder para ayudar a su hijo o hija con el sobrepeso y la obesidad. Los niños son mucho más fáciles de influir que los adultos. Su niño seguirá su ejemplo, por lo tanto usted debe ser un buen modelo a seguir. Enseñe a su niño a consumir alimentos saludables y a ejercitarse.
Consejos que puede llevar a cabo:
- Tenga siempre en su hogar bocadillos (“snacks”), como frutas y vegetales crudos. No lleve alimentos no saludables al hogar.
- En el supermercado, permita que su hijo seleccione las frutas y los vegetales que disfruta comer. Oriente a su hijo a probar cosas nuevas.
- Cuando prepare las comidas, incluya proteínas saludables como pescado, huevos, nueces de distintas clases (frutos secos) y carnes magras como el pollo y el pavo. Incluya también vegetales y granos integrales (panes y cereales).
- Ase los alimentos, o hágalos a la parrilla o hervidos en lugar de freírlos.
- Ofrezca leche, queso y productos lácteos bajos en grasa.
- Evite las comidas en restaurantes de comidas rápidas. De lo contrario, escoja las opciones más saludables disponibles cuando coman en restaurantes de comidas rápidas o con servicio a la mesa.
- Oriente a su hijo a tomar mucha agua o leche en vez de bebidas con azúcar añadida tales como jugos de fruta, bebidas de frutas, refrescos, bebidas para deportistas, bebidas energizantes, etc.
- Evite usar los postres o las golosinas como recompensas.
- Limite el tiempo que se pasa frente del televisor, la computadora o los videojuegos.
- Anime a su hijo a estar activo. Intente que juegue activamente durante una (1) hora por día. Dedique tiempo a compartir actividades que requieran moverse con su hijo o hija; realicen caminatas en familia y jueguen juntos al aire libre todos los días.
- Sea un buen modelo a seguir. Haga lo que dice, coma saludablemente y haga ejercicios.
Algunas veces puede ser difícil conseguir que los niños prueben alimentos nuevos y aumenten su actividad física. Pero no se desanime, proponerle a su hijo opciones saludables constantemente con el tiempo mejorará las posibilidades de que su hijo desarrolle un estilo de vida saludable.
Por: Gabriela González LND, CMCP
Nutricionista Dietista