Fumar y la Cavidad Oral
El fumar cigarrillos tiene muchos efectos negativos en la cavidad oral que pueden ir desde una simple mancha hasta tumores cancerosos. Los efectos negativos del fumar en los dientes son mayormente extrínsecos, o sea en la parte de afuera de los dientes. Los pacientes que fuman presentan manchas en el esmalte, algo que no es estético. Estas manchas tienen que ser removidas por un profesional de la salud oral (dentista, higienista, o asistente dental). Existen productos comerciales que reclaman el poder de remover estas manchas, pero algunos de ellos son muy abrasivos para los dientes, por lo que es importante consultar a su dentista.
El periodoncio o tejidos que rodean a los dientes también se afectan con el fumar cigarrillos. Cuando hablamos de periodoncio, no solo son las encías y mucosa, también incluye el hueso alveolar, que rodea los dientes. La Academia Americana de Periodoncia ha hecho recopilaciones de estudios en el área de fumar y la enfermedad periodontal. Se ha demostrado que los fumadores tienen un 40% más probabilidad de padecer enfermedades periodontales, como gingivitis o periodontitis. Gingivitis es una inflamación de las encías y periodontitis es inflamación con pérdida de hueso. Los fumadores, a nivel sistémico tienen problemas de quimotaxis (comunicación entre células) por lo que su sistema inmune tiene problemas para combatir patógenos que dañan los tejidos. Los microrganismos que tenemos en la cavidad oral se reproducen con facilidad y si no los combatimos se producen infecciones, abcesos, etc. A nivel local, el paladar se engrosa y se forma una especie de callosidad para mantener la sangre a una temperatura adecuada. Cuando esto sucede, se observan unos puntos rojos en el paladar que son glándulas salivares tratando de salir a la superficie. Si usted o algún conocido suyo tiene alguna de estas situaciones no dude en consultar a un periodoncista.