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Disfunción de las trompas de Eustaquio

Disfunción de las trompas de Eustaquio

Por: Dra. Mariella Rodríguez
Audióloga Clínica

Empecemos por definir las trompas de Eustaquio; son tubos que igualan la presión del aire entre el oído medio con la presión de afuera. Estas van desde el oído medio, parte trasera de la nariz y llegan a la garganta. Cuando estos tubos no abren durante deglución o bostezo, se presenta una disfunción, la cual crea una diferencia entre la presión externa y la interna. La forma natural del tímpano vibrar es entonces alterada. De este modo se generan molestias comunes que pueden ir desde sensación de llenura, sensación de “pop”, dolor, zumbido en el oído o tinnitus, mareos e incluso pérdida auditiva temporera. Posiblemente el paciente sienta el oído tapado cuando la presión externa cambia pero la interna no. Cuando buceamos, viajamos en avión o estamos en la montaña es hasta cierto punto normal que notemos cambios en presión, los cuales tienden a desaparecer cuando tragamos, bostezamos o masticamos.

Para el diagnóstico de la condición existen varios métodos; muy importante es el historial médico enfocado en alergias, infecciones del tracto respiratorio e incluso exposición a cambios en presión recientemente. La otoscopía es un mecanismo utilizado por los profesionales para observar el estado del canal auditivo, con un dispositivo con aumento que muestra la membrana timpánica y la presencia de alguna anomalía. Como prueba contundente tenemos la timpanometría; que no es otra cosa que la medida del movimiento del tímpano y su nivel de presión. Es una prueba corta, la cual no causa molestia y nos permite conocer el estado del oído medio. Es excelente para niños los cuales hasta los 5 años padecen frecuentemente de Disfunción en las Trompas de Eustaquio (DTE). Entre las pruebas recomendadas está el audiograma que mide el nivel al que detectamos distintos sonidos y percibimos el habla. Esto nos puede indicar la presencia de pérdida auditiva y correlacionándolo con las pruebas de oído medio podemos saber a qué parte del oído adjudicamos el problema de haber alguno.

Los audiólogos entre las pruebas que realizan se aseguran de obtener datos de las distintas partes del oído para localizar el problema. De este modo, si es necesario el referido al otorrinolaringólogo, los mismos enviarán a sus pacientes. Así mismo, cuando los médicos quieren obtener más información de la cual visiblemente se observa o por medio de historial se toma, estos envían a sus pacientes a un estudio audiológico completo, el cual es comúnmente cubierto por los planes médicos por lo menos una vez al año. Como forma preventiva, se sugiere que si siente algunos de estos síntomas antes mencionados o tiene duda al respecto, consulte a su médico antes de exponerse a cambios en presión y realice una prueba audiológica completa con un audiólogo licenciado de preferencia. Si se encuentra congestionado, evite viajar en avión, subirse a elevadores, transitar cercano a montañas o bucear. Evite factores de riesgo como fumar, alergias y la obesidad.

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