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Cuando el Cáncer Vuelve

Cuando el Cáncer Vuelve

Cuando el cáncer vuelve, se habla de “recurrencia” o “cáncer recurrente”. Esto significa que aunque se le administró tratamiento y se pensó que usted ya se había librado del cáncer, algunas células cancerosas sobrevivieron y han crecido ya lo suficiente como para formar un tumor o causar problemas.
A veces, le aparece a uno un cáncer nuevo que no se relaciona con el anterior; este se denomina segundo cáncer primario. Esto no es común, pero haber tenido cáncer una vez no significa que nunca se tendrá otro cáncer. Puede ocurrir.
Cáncer Recurrente
El cáncer recurrente es el mismo cáncer que vuelve. No es un tipo de cáncer nuevo, diferente, aun cuando pueda aparecer en otra parte del cuerpo. Por ejemplo, el cáncer de colon recurrente puede aparecer en el hígado. NO se trata de cáncer de hígado, sino del cáncer de colon recurrente con metástasis en el hígado (que se propago al hígado).
¿Cómo hacerle frente?
Cuando el cáncer vuelve, uno puede llegar a sentirse más desesperanzado que nunca. Es posible que piense que su cuerpo o equipo de atención médica le han fallado; es normal sentirse enojado y disgustado. Es difícil hablar sobre el cáncer y los planes de tratamiento ¡otra vez! Hable con su médico y con sus seres queridos acerca de cómo se siente.
Para tratar la recurrencia
Su médico hablará con usted acerca de sus opciones de tratamiento. Puede que usted decida obtener una segunda opinión de pare de otro doctor. O tal vez prefiera recibir tratamiento en un centro especializado en cáncer donde se tenga más experiencia en relación con su tipo de recurrencia de cáncer.
Algunas personas obtienen algunos de los mismos tipos de tratamiento que tuvieron antes para combatir el cáncer. Pero a veces, su doctor prefiere no usar cierto medicamento a causa de sus efectos secundarios o porque usted ya los ha usado. Otra cosa que hay que tener en cuenta es que las células cancerosas puedan volverse resistentes a la quimioterapia. A menudo, los tumores que regresan no responden al tratamiento tan bien como lo hicieron la primera vez. Puede que necesite medicamentos diferentes para matar las células cancerosas, porque éstas funcionan de modo diferente.
Pregunte a su doctor porque cierto tipo de tratamiento es mejor. ¿Tiene, en su caso, 2 o 3 opciones de tratamiento? Hable con su enfermera, su doctor y sus seres queridos acerca de sus opciones. Solo usted puede decidir lo que sea mejor para usted.
Tratamiento del cáncer como enfermedad crónica
El cáncer puede que no sea algo que acontece solamente una vez. Puede volver dos voces y aun tres. Incluso puede convertirse en una enfermedad crónica que realmente nunca desaparezca. Aunque tal vez no tenga cura, con frecuencia, el cáncer recurrente se puede controlar. Es necesario que usted sepa que hay quienes, aun sin haberse curado del cáncer, siguen viviendo por meses o años, a pesar de los cambios que pueden haber experimentado en sus vidas. Para tales personas, el cáncer es como la diabetes o una cardiopatía: una enfermedad crónica mayormente controlada con tratamiento.
¿Qué pasa si el tratamiento deja de tener efecto?
A veces, el cáncer sigue creciendo durante el tratamiento, pero otro tratamiento podría funcionar. El hecho de que una persona haya pasado por muchos y distintos tratamientos sin lograr detener el cáncer, podría significar que este se ha vuelto resistente a todo tratamiento. Llegando ese momento, es importante sopesar los beneficios de un nuevo tratamiento en relación con sus riesgos (por ejemplo, el estrés de someterse de nuevo a tratamiento y a los efectos secundarios que este conlleve). Cada persona tiene una manera distinta de considerar algo como esto.
Este es, quizás, el momento más difícil de su lucha contra el cáncer: cuando tras haberlo probado todo, nada ha surtido efecto. Si desea seguir recibiendo tratamiento para combatir el cáncer, tendrá que considerar que probabilidades hay de que el tratamiento le ayude. ¿Hará que se sienta mejor? ¿Le ayudará a vivir por más tiempo? Por su experiencia con casos similares, su médico podrá darle una mejor idea en cuanto a las probabilidades de que el tratamiento le ayude.
Independientemente de lo que decida hacer, es importante que usted se sienta de la mejor manera posible. Asegúrese de pedir y recibir tratamiento para cualquier síntoma que sienta, como por ejemplo, náuseas y dolor.
¿Me voy a morir?
El regreso del cáncer no significa que quien lo padece vaya a morir; pero esto es algo en lo que aún habrá que pensar. Estos momentos pueden ser muy difíciles para usted. Hable con su médico sobre sus temores e inquietudes. Recuerde que, aun cuando esté saludable, resulta útil hacer planes ante la posibilidad de morir.
Tener esperanza es importante. Quizás su esperanza de hallar una cura ya  no brille tanto, pero aun brilla la esperanza de pasar buenos momentos (momentos llenos de gozo y significado) junto a sus familiares y amigos. En cierto modo, hacer una pausa en su tratamiento contra el cáncer en estos momentos le da la oportunidad de reenfocarse en lo que es más importante en su vida. Ahora puede ser el momento de hacer algunas de las cosas que siempre ha querido.
Tener cáncer recurrente no le coloca más allá de la esperanza o de la ayuda; puede que esté viviendo con una enfermedad que se puede tratar o controlar. Usted puede aprender a vivir con cáncer.
Información de la Sociedad Americana Contra el Cáncer

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